Capitulo 1B
Un suelo de parquet, una bici tirada, una mochila, varios trajes de taichi y taekwondo blanco, naranja y negro; en una cómoda con tres plantas pequeñas Bonsais y cactus, casi muertas, y en el suelo varios montones de papeles desperdigados.
Una cama, en ella un hombre dormido con barba de tres dias.
Abre mucho los ojos despertandose de golpe, son grandes y verdes grisáceos, mirada perdida y arrastando apesadumbrado y desganado todo su cuerpo, se sienta, alarga la mano hacia el suelo casi sin mirar y coge una camiseta sin mangas deportiva negra, se pone de pie y va andando pisando todo.
Entra en el diminuto cuarto de baño, que tiene casi la misma pinta que la habitación, se pone donde el lavabo, se echa agua en la cara, en las axilas, no se seca, se pone unos pantalones cortos también deportivos que están en el suelo de ese cuarto.

Está corriendo por unos caminos por los que apenas se ve que pase gente.
Entra en un gimnasio con una fachada muy humilde.
Dentro de estas instalaciones, nada solo en la piscina, y con unos guantes da un par de golpes a unos sacos de boxeo.
Se ducha en el gimnasio donde se ve que empieza a venir mas gente.
Sale del gimnasio bien peinado y vestido de traje.
Entra en un edificio gubernamental. Llega a un despacho, con una plaquita a un lado, que pone Enlace.
Entra en ese despacho, un poco desordenado, y en la mesa tacos de carpetas.

Se sienta, en el ordenador hay una ventana digital que pone Casos Postergados Detenidos, que está parpadeando, alertando.
En la parte baja de la mesa abre una puerta que resulta ser una mininevera, de ahí coge una bebida energética y unos bollos que parecen hechos de una empresa artesanal.
Llaman al despacho, y sin esperar a que se les diga nada, entran una mujer y un hombre.


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