Anatomía de… Candice Renoir

Mujer, caucásica, rubia, con el pelo ondulado y a la virulé. 85 kg, 1’70-75 aproximadamente. Risueña hasta la muerte. Ella es la definición de ‘cuando sabes que eres buena en tu trabajo no quieres presumir de ello pero quieres callar bocas’.

Divorciada, migrante, 4 criaturas, dos gemelos malvados. Todos sus hijos fiel reflejo de la astucia, picardía y el ingenio travieso de cada edad de antes de la madurez real.

La comandante Renoir no quiere ser jefa del todo porque la parte administrativa le da urticaria. Ella exhuma sensualidad por todos sus poros, a la par que creatividad, no lo dice pero lee el perfil moral de prácticamente todo el mundo, menos de a lo que sus relaciones sentimentales se refiere.

Ella en sí entera es disfuncional, su relación con sus hijos es casi inexistente porque huye de hacer los deberes, huye de cocinar, de organizar las actividades extraescolares y lo puramente establecido. No hace casi nada más que errar en las minucias del día a día. El 90% de las veces son sus hijos los que a través de sus travesuras y triquiñuelas saben leer las necesidades de la comandante Renoir y se convierten en los que enseñan a su madre, a ser madre, a ser mujer, a no olvidarse de su personalidad. Actuando muchas veces como la voz de su conciencia.

Sin embargo jamás se pone en tela de juicio el amor incondicional que se tienen los unos a los otros, además Candice es cariñosa con sus hijos, y demuestra que si eres buena persona y tienes buenos valores da igual que no tengas ni idea de cómo se tiene que educar a los hijos, y que no se puede estar pendiente de todos en todas sus etapas de crecimiento, lo estarás haciendo bien porque lo importante es que estés ahí y tengas buenas bases morales.

La comandante Renoir es un agradable desastre, en el trabajo sus métodos son improvisados pero siempre pensados, se equivoca constantemente, parece que trabaja sola pero siempre se encarga de que su equipo sepa de su compromiso con los casos de una forma muy tierna y efectiva.

Ella es puro caos, es impulsiva, sensible, explosiva, impertinente, caótica de buenas maneras. La serie consigue que sea impredecible pero con un carisma sin parangón.